¿Donde estará EL Compa?

Cuando salíamos por las noches a caminar por jirón quilca y por el boulevard, Rocio y yo siempre buscabamos entre todos los vendedores de panfletos y libros a un personaje de lo más interesante, un tio que ofrecía libros, panfletos, fotocopias de libros, etc. con contenido socialista-comunista (uy ke miedo!), entre los titulos ke ofrecía estaban por ejemplo libros como "siete ensayos de la realidad peruana, el capital, materialismo dialéctico, poemas humanos... etc".

De curiosos en esos dias nos juntábamos con los demás y escuchábamos a los "oradores", varios de ellos muy inteligentes e interesantes por cierto, algunos otros menos cuerdos y por ahi no faltaban los borrachines (gracias por todo el conocimiento aprendido), incluso aveces interveniamos con alguna opinión ya sea contraria al expositor o defendiendo "la causa".

En esas noches se juntaban grupos de distintas tendencias y expresaban sus ideas algunas de ellas más utópicas ke otras (ningún joven podría vivir sin ideas utópicas), pero dentro de todo ese crisol de ideas y discursos improvisados resaltaba la figura del personaje ke mencioné al comenzar el escrito.

El compañero (él solía llamar a todo transeunte de esa manera), a la vez ke vendía sus textos (a una luca), también exponia sus ideas, para los ke le prestabamos atención era toda una cátedra, aveces era visceral otras era lírico y ante las interrogantes nuestras se mostraba feliz.

En un par de ocasiones me animé a comprar un par de fotocopias, uno titulaba "la masonería en el Perú" y el otro "Los dueños del Perú". Le dije -compañero aver esa de la masoneria- Rocio me miró con una carita de "ke chucha dices".

El compañero amablemente me alcanzó la separata y de paso empezo su discurso en torno a ese tema, y asi nos fuimos a seguir paseando.

-Vamos a pasear por quilca- dijo Rocio.

Vamos pues!, de pasada vamos a ver si esta por ahí el compa.

Llegamos y como siempre habia gente en ruedos y los mismos oradores de siempre, nos acercamos hacia el lugar del compañero y ahi estaba él hablando de la globalización. Escuchar al compa era sinonimo de aprender, (obviamente ke no escuchabamos como unas ovejas más),siempre decía el: "lean, lean y lean, ke no les engañen, despierten!"

de todas maneras habian puntos de vista en ocasiones disímiles y hasta antagónicos pero en el fondo lo admirabamos por la manera como vivía su filosofía e ideologia, eso era lo admirable, no su teoria ni sus textos.

A los pocos dias habian cerrado el boulevard de quilca para refaccionar o algo asi, toda esa mancha de lokillos ke se agrupaban y el compa, ya no estaban. Pusieron cafés y restaurantes en esa zona (el capitalismo y sus cosillas) y todo estaba limpio y bonito pero vacío, sin esencia.

Caminando por esas viejas calles del centro era inevitablemente preguntar "¿Donde estará EL Compa?".

Y ke será de él, a lo mejor esta por ahí en alguna otra calle dando a conocer sus pensamientos, o tal vez no. (facil y lo han desaparecido)

Sentados en uno de esos cafés del boulevard de quilca tomando un par de piscos sours (el nuevo vicio) brindamos por "el compañero"

-Salud! por el compa!-

P.D: Si alguien sabe el paradero del compa, pase la voz. Habrá buena recompensa.