"la historia de un muchacho enamorado de una estrella. Adoraba a su estrella junto al mar, tendía sus brazos hacia ella, soñaba con ella y le dirigía todos sus pensamientos. Pero sabía o creía saber, que una estrella no podría ser abrazada por un ser humano. Creía que su destino era amar a una estrella sin esperanza; y sobre esta idea construyó todo un poema vital de renuncia y de sufrimiento silencioso y fiel que habría de purificarle y perfeccionarle. Todos sus sueños se concentraban en la estrella. Una noche estaba de nuevo junto al mar, sobre un acantilado, contemplando la estrella y ardiendo de amor hacia ella. En el momento de mayor pasión dió unos pasos hacia adelante y se lanzó al vacío, a su encuentro. Pero en el instante de tirarse pensó que era imposible y cayó a la playa destrozado. No había sabido amar."
domingo, 14 de octubre de 2007
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3 comentarios:
me acuerdo perfectamente de cuando me contaste la historia en el momento preciso
gracias por eso red
besos amarillentos
grande red!!!
me gusto la historia
:D
ME ENCANTO TU POST
kisecillos
lunares
Es necesario el golpe y eso es lo que enseña a amar. "No hay una escuela que enseñe a vivir", y a amar tampoco. Se aprende constantemente. Pero uno debe aprender a entenderse y conocer cuales son sus límites en casos como estos: la ambición.
sigo leyendo...
Saludocs!
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